martes, 11 de agosto de 2015

Diario de mis Calamidades (Detrás de un Podio)

Después de reventar en Pareja (hace ya un mes y medio) decidí tomarme unos días libres de descanso para volver con más fuerza, y la verdad es que lo conseguí. Estuve trabajando mucho en el gimnasio para corregir los déficits musculares que tenía, especialmente el el cuádriceps y fortaleciendo el resto de la musculatura. Todo correcto, incluso me casqué unas buenas series con Fernando y Héctor. Parecía que de nuevo "volvía a ser yo" pero hete aquí que las circunstancias se tuercen, por azar o "porque tienen que torcerse", llámalo destino o mala suerte.

En uno de esos días de locura, martes, para ser exactos, con una ola de calor de mearse encima, decidí salir a correr a las 6.50 de la mañana, con la fresca. Todo genial hasta que te pica una avispa en el pie, aún así aguantas y vuelves a casa, muy jodido, pero bueno, aguantas porque no se te ha hinchado. La cosa cambia a las 24h y no puedes ni doblar el tobillo y tu pie parece el de un elefante. Paras un par de días y todo vuelve a la normalidad. Entonces vuelves a hacer unas series con Fer, estás en estado de gracia (por el descanso) y los 500 caen a 1'30" como churros y hasta aguantas a 1'25", pero como consecuencia de la picadura has cambiado la biomecánica, hecho del que no te das cuenta hasta por la noche, porque te empieza a molestar la fascia.

Y de molestia nos vamos a dolor, y de dolor a cojera. Por lo que renuncias a entrenar para ver si se pasa, y te centras en los masajes, los estiramientos, siguiendo los consejos de tu fisio de confianza. Hasta tienes a tu novia estirándote 3 veces al día, pero nada chico, que no hay manera. Parece que cuanto más descansas, peor. Así que te das cuenta de que has estado perdiendo el tiempo, y que cuando menos te duele es cuando entrenas. Así que vuelves al gym y nadas, y montas en bici, porque correr no puedes sin dolor... 

Decides correr Ávila, porque el dolor ha remitido. Acabas haciendo un primer 2500 de risa, en la que los caracoles te pasan, pero, ¡qué cojones! Hemos venido a probar. Al día siguiente tienes molestias normales... Recurres al fisio, que ya no sabe ni qué decirte o hacerte. Punción seca, tape, descarga, acupuntura... 

Y así te plantas en la última semana (la pasada), en la que después de hacer 3h de senderismo y acabar con los gemelos y los vastos internos al pil-pil... no te molesta al correr. Al correr suave. 
Así que esta semana pasada he conseguido correr 4 días la friolera de 30' por día (alguno 40') sin molestias aparentes. Y en este plan te vas a Agramón. Llevando 3 semanas de entrenamientos de mierda entre viajes, lesiones, molestias, curro y estudio. Y haces tercero, con dos cojones. 
Lo que muchos no saben, es que yendo el sábado por la mañana a Agramón sufrí un pequeño accidente con el coche (en el que también venía Javi Romo, que hizo 2º). Empezó a llover y el suelo estaba sucio, así que en la salida de una curva, en la incorporación de la A-43 y despacito, el coche patinó y fuimos contra el quitamiedos, trompeando y llevándonos un susto. 

La grúa recogió el coche y nosotros pudimos ir a Agramón gracias a los padres de Javi que se pasaron a por nosotros. Llegamos muy muy justos de hora y luego todo fueron prisas. Pero acabamos, 2º y 3º, con la sensación de no andar una mierda en bici, todo hay que decirlo. Después T3 en Albacete y regreso a Villafranca en tren, donde me recogió mi tío y me trajo de vuelta... 

Sé que son cosas que pasan, pero a veces me pregunto si no hay otro desgraciado al que le pasen...