lunes, 30 de abril de 2018

La sombra de Triatlón de la Cerámica

Como ya escribí en las RRSS, el triatlón de Talavera fue el último y bochornoso capítulo del circo en el que se está convirtiendo el triatlón en los últimos tiempos. No podemos decir que sea nuevo, pero tampoco debemos permitirlo, ni mucho menos, mirar hacia otro lado, ni escudarnos en el "es que lo estaban haciendo todos". 

Para entender esto último hay que partir de un punto básico, y es el de la educación. Muchos dicen que a los triatletas que competimos, a un nivel medio, como el que escribe, como en el más alto, Alarza o  Arévalo, nos ha forjado el carácter el Tajo. Quizás sea así, o quizás compartamos una serie de valores que en nuestra actual y decadente sociedad se está perdiendo. Y de ahí mi enfado, mostrando la rabia y la impotencia de querer correr en casa, querer hacerlo bien y que por decisiones, no se tome. 

Lo primero, aclarar, que los primeros responsables somos "nosotros", como competidores y triatletas, los responsables del escarnio que se vivió ayer por la mañana. "Somos" los únicos culpables de no respetar las normas, pero, desde luego, no los únicos. 

Aclarado este primer punto. Vamos a ver qué fue lo que pasó ayer (y en días anteriores).

PRECEDENTE: 
Siempre que se ha hecho el triatlón de Talavera, o al menos en las últimas cuatro ediciones ha llovido y el río ha llevado corriente, por lo tanto, no es algo nuevo para ninguno de los estamentos de la prueba: Corredores, Organización, Jueces y Empresa de Cronometraje. 

Durante los días previos se veía, sabía y no había que ser Stephen Hawking para saber que el río iba a llevar corriente, fuerte, pero perfectamente nadable. Por lo tanto, que me lo diga alguien sin estar dentro del agua me toca mucho las narices.  

EL MISMO DÍA:
Consecución de errores de todas las partes.
- Los jueces llegan a la prueba entre las 9.30 y las 9.45, es decir, casi después de lo que lo hacemos los competidores.
- Los bomberos llegan con la zódiac a las 10.30 por orden del Ayuntamiento (tarde).
- La organización no contacta con el club de piragüismo Talak para tener asistencia dentro del agua (principalmente porque no iba a ser necesario, ni tampoco diseña un plan de contingencia). 

Hecho este inciso continuamos con el desarrollo de los acontecimientos.

Me tiro al agua a calentar a las 10.45, nado un poco, me salgo, me vuelvo a tirar y salgo nadando hacia la isla desde donde se iba a dar la salida. Antes de llegar a la altura de las boyas de salida me paran otros 3-4 competidores y me avisan de que los jueces nos están sacando del agua. Incomprensiblemente, bajamos por el río hasta salirnos del agua. Allí nos sacan de la orilla y de una manera improvisada se hace una charla técnica sobre la modificación del recorrido y se llega a hablar de suspender el segmento de natación por la corriente. 

Todo esto sin tener un megáfono y sin escuchar absolutamente nada.  

Cuando tienes cara de gilipollas
Atónitos seguimos fuera del agua. Son más de las 11 de la mañana (es decir, ya llevo 20' a remojo y totalmente pasmado por tener que estar quieto en la orilla). Vemos cómo los bomberos cambian las boyas de sitio. Esa decisión sigue sin convencer a los jueces. Vuelven a cambiar las boyas. Ya son las 11.10. Nos meten en el agua. Volvemos a ver un tercer cambio de boyas. Estamos cerca de 15' esperando a ver qué cojones pasa. Nadie dice nada. Hace frío y estamos temblando todos. Nos intentamos distribuir por la orilla, pero el talud y las piedras hacen imposible permanecer flotando sin movernos y alineados. Pasan los minutos, nos advierten que nos echemos para atrás en un hueco inexistente. Y como suele pasar, de repente y sin previo aviso, la bocina. Esto ocurre sobre las 11.25, es decir, llevo parado, mojado y casi hipotérmico cerca de 45' gracias a una serie de horribles decisiones.

El resto, se puede ver en el vídeo. Me peleo cerca de 2' con gente que está acortando en la boya y que se me echa encima desde la izquierda atajando. Cuando consigo dar la boya la cuerda casi se me enreda en el pie derecho. La gente se agarra a ella y se desplaza. 

La sensación de hacer las cosas legales es de SER GILIPOLLAS. 

Y como le decía a Carlos Asensi en meta "nadie se ha saltado la boya". La realidad es que empiezo a pasar a grupos y grupos en el cerro negro que no hacen ni el intento de seguir la rueda, ¿nivel o más bien remordimientos por haber hecho trampas? Los que me conocen saben que prefiero quedar el 80º a hacer trampas, y ayer, tuve que salir cerca de esa posición en el agua. 

El resto de la prueba, casi anecdótico. 

Y ahora las cuestiones principales:
¿Cómo se plantea suspender la natación a la hora de inicio de la prueba cuando ya están los nadadores en el agua calentando?
¿Qué se ha estado haciendo antes para no tomar esa determinación con, al menos, 30' de antelación al inicio de la prueba?
¿Por qué se altera tres veces el recorrido hasta que cuadra con el criterio de los jueces (que no sabemos cuál es ni en base a qué se tomó)?
¿Por qué éste año sí se considera que hay una corriente excesiva y otros años no?
¿Por qué se decide modificar el recorrido y acortar la natación cuando SE SABE DE SOBRA la particularidad del recorrido de natación? 
¿Por qué no había suficientes jueces en todos los puntos del recorrido si éste no se ha modificado (a excepción de la natación, desde las primeras ediciones) en los últimos 10 años?
¿Por qué, teniendo los antecedentes, no se ha puesto una piragua en la boya, o se ha dispuesto un recorrido con un doble giro de 90º y no uno de 180º? 
¿Para qué llevamos un chip si luego las clasificaciones y los parciales son un chiste?

El triatlón de Talavera siempre ha tenido esta peculiaridad, igual que el de Alpe D'Huez tiene sus 21 curvas, y no por eso te ponen a dar vueltas por el plano de Bourg D'Oissans, por lo tanto, me parece una cagada en toda regla. Lo de ayer, no se puede considerar triatlón, fue una broma pesada. 

Me parece bien la promoción del triatlón, pero estamos en una prueba del circuito regional, por lo tanto, el que no pueda nadar y remotar el río, que se apunte a los triatlones de promoción de Santander Series, Triwhite o cualquier otra variante de los mismos.