In Omnia Paratus

In omnia paratus, latín puro y duro y lema del 18º Regimiento de Infantería de los EE.UU; traducido al castellano: preparaos para todo.

Sin días como hoy frases como esta no cobrarían todo el sentido que merece. Hoy fue una lucha tremenda contra el mundo: un viento infernal, frío, nubes que anunciaban tormenta y lluvia, cansancio y una ruta llena de repechos, por no mencionar el lamentable estado de algunas carreteras. Una lucha contra los elementos. 115km de ruta por los siguientes pueblos, y no sé si se me olvida alguno: Alberche - Alcaudete (por el carreterín) - Ctra. de la Fresneda a Torrecilla de la Jara - Retamoso - Ctra. de Los Navalmorales - Santa Ana de Pusa - San Martín de Pusa - San Bartolomé de las Abiertas - Talavera. El aire siempre en contra cuando no era lateral, y pasa lo de siempre, mucho valiente en las cuestas abajo, pero a la hora de las cuestas parece que todo el mundo tiene reparo en tirar. Cómo no, para algo estábamos los Tritalaveras para subir, y llegados a un punto en la carretera de la Fresneda, el míster Sergio Herrero nos ordena atacar para 'sacudir el avispero', arrancada fuerte y con cojones de Aldana desde atrás y yo detrás, sin saber ni cómo era capaz de aguantarle, detrás de mí se pega Luis Rincón con el desviador delantero bloqueado y sin poder quitar el plato. Así hasta el cruce de Torrecilla de la Jara, donde intenté empalmar con Luisete pero fui incapaz, por detrás Vivérrido y Aldana nos alcanzaban después de coronar e iniciábamos el descenso.

Un descenso en el que recortó diferencias y empalmó con nosotros Jaime M. de Luarca, y en el que la tensión se hizo patente en una curva tomada a 60kmph después de un llano donde Vive casi va a la cuneta, y nosotros 4 detrás. Parada en Retamoso para reagruparnos y Luarca y Luisete se van por delante para hacer series. Nosotros piano piano para que la gente aguantara. La siguiente para en Santa Martín de Pusa para comer algo. De ahí hasta San Bartolomé de las Abiertas con un aire feroz soplando en contra. De Bartolo a Talavera con la ascensión del Sangrera y un cambio de viento, que pasaba a ser lateral.

Por último, el susto vino en la bajada del Cerro Negro, donde un golpe de aire casi hace que vaya al suelo, la verdad es que 'de corbata' se me hace poco. Manda cojones que después de 112km casi me caiga a 2km de entrar en Talavera...

Por lo demás, el resto de la semana transcurrió con normalidad, lunes y miércoles natación, martes transiciones en la pista, ayer bici y carrera, y mañana toca carrera contínua con subida a La Labraza del Alto y piscina, para terminar el domingo, si el tiempo lo permite, con una ruta por la zona del Piélago.