Incomprensible, ¿verdad?. Jaja. La verdad es que sí. Y es que después de remachar casi todas las carrer
as a pie, tras una natación regulera y una bici bastante aceptable, llegó el momento menos deseado de toda la temporada. Algo que no te importaría que sucediera en los populares, o en carreras de segundo orden, el REVENTÓN corriendo a pie. Y más te jode cuando te pasa en tu campeonato regional, pero bueno, son cosas que pasan, las cosas nunca suelen salir como quieres y lo más importante, lección que aprendí de un fenómeno y frase que él mismo dijo cuando llegó a meta tras quedar 4º en el regional de cross: "no siempre se gana". Lo de ganar o perder, da un poco lo mismo, si llevas buenas sensaciones puedes decir, ¡joder! me encontraba bien pero no he podido dar más de mí mismo. Pero cuando vas jodido y te fallan las fuerzas piensas si hiciste algo mal... y cuando viene la primera arcada y el trago de vómito reniegas. Con el dolor de estómago te encoges, aparece el flato y con el primer mareo ya te replanteas retirarte. Solo el orgullo y apretar los dientes te salva... aunque llegas ciértamente desolado a meta. Perdiendo en 'tu' segmento más de diez plazas...
Aunque siempre quedará el consuelo de que tu cara descompuesta fue vestigio de lo que sufriste en la carrera, y más aún cuando tus propios rivales te lo reconocen. Algo es algo. Hasta de la peor herida serás capaz de sacar algo positivo... o al menos yo lo veo así.
Y lo negativo de la competición será siempre los innombrables, que tan solo su mención hace que se me revuelvan las tripas, y son aquellos hijos de la grandísima puta que aún sabiendo que la competición es sin drafting te chupan la vida y siempre salen indemnes... la vida no es justa, pero es una lástima no llevar una barra de hierro en la bici para darle en la cabeza a algún bastardo de esos.
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