Tasting the dust

Ha pasado bastante tiempo desde la última actualización, en parte por falta de ganas, y en parte por falta de Internet en la Residencia. Desde los últimas acontecimientos parece que la cosa se ha "normalizado" más o menos. A base de tener que agachar la cabeza y obedecer a raja tabla las imposiciones patriarcales. Nadie dijo que el mundo fuera justo, pero es lo que hay. Por otra parte el tiempo ha pasado, poco a poco las materias se van dando, las prácticas se suceden, con mayor o menor énfasis en ello, los entrenamientos, cuarto y mitad de lo mismo. Los trabajos se acumulan, individuales o colectivos. Y mientras tanto, poco a poco, como las hormiguitas voy subiendo los granos de arena que me encuentro en el camino.

Entre las prácticas debo decir que soy casi un experimiento humano, jaja, el otro día tocó un Electrocardiograma (Frecuencia Cardíaca 50, con café y resfriado incluído). Hoy Aspirometría, con cierta incomodidad por los mocos, y con todos los valores por encima de 100. Esta tarde me pasé por el laboratorio de Fisiología para que me sondearan los tendones y la rótula para un estudio que están haciendo y me dijeron que me pasara mañana por la mañana sin desayunar para un "in body" más conocido como la composición del cuerpo, vamos, que me hayan los porcentajes de grasa y tal. Luego en las clases de Gimnasia Rítmica están las figuras de acrosport, acrobacias y coreografías. Lo del acrosport tiene sus riesgos, pero es divertido. También están las prácticas de Atletismo con Martín Velasco, especialmente jodido por el tema de los saltos (triple y longitud) y sus ejercicios de técnica sobre tartán lo que contribuye a que se te jodan las rodillas. Las prácticas de Natación con Llop bastante divertidas después de dejar, en parte, de lado la natación para niños, frío a veces, y otros días, como ayer, con problemas químicos en la pisci (se rompió el dosificador de cloro durante el finde y el lunes estaba el agua turbia de cojones). Finalmente quedan las prácticas de Psicología en las que o te ríes o te duermes (casi igual que en las teóricas).

Respecto a los entrenos, la cosa marcha, cada vez me encuentro más agusto nadando, haciendo los ligeros tocándome el bolo 4 segundos más rápidos que el año pasado y sin despeinarme (por cierto, hecho improbable porque me he cortado los rizos). De momento toca trabajo suave, ligero y aeróbico, nada de series, ejercicios de fuerza, gimnasio, fraccionados en hipoxia y trabajo general de pretemporada. Aún así, es algo representativo que ya esté doblando 3 o 4 días semanales, aunque las cargas son leves. Sin duda alguna, lo que peor llevo es llegar el finde a casa y no poder levantarme tarde, jaja. Odio madrugar y cuesta levantarse, especialmente los domingos, que suena la corneta a las 9 de la mañana para dar pedales a las 10. Lo que significa que el sábado por la noche prácticamente no existe. Así que habrá que tirar de jueves o de días intermedios para "relacionarse".

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El frío golpeba su cara una noche más, de nuevo su sombra era íntima compañera, confidente de pensamientos y única acompañante nocturna. El vaho salía de su boca, el viento le susurraba palabras incomprensibles al oído. En su mente los últimos sueños, que escondían una terrible realidad disfrazada de paradójica ilusión: "...Se giró y pudo ver la cara de aquel ángel mientras éste le arrancaba la piel y de su querida compañía, y la reconoció, había visto aquel rostro mil veces, y recordaba las sombras reflejadas en él en la penumbra. De nuevo giró la cabeza y pudo ver la impasible cara de su acompañante... y en aquel momento sintió morir..." Despertó sobresaltado, envuelto en sudores, y se preguntó si realmente la realidad era ésa, tal vez fuera producto de una mente adormecida, o podría ser el mismo reflejo de un futuro no muy lejano. Fuera como fuese, tembló y se preguntó a sí mismo qué pasaría si realmente no fuera un sueño, sino una premonición...