Un día en la vida

De lo caótica que puede llegar a resultar mi vida sólo pueden extraerse conclusiones positivas si sobrevives. Quizás haya cambiado algo mi mentalidad, tomando cada día casi como un reto, una ladera embarrada que escalar. 

Seguimos en la misma tónica general, muchos trabajos, poco tiempo, y como dicen algunos que me conocen "tu vida es contrarreloj". De eso te das cuenta cuando vuelves de la universidad y vas resolviendo asuntos por teléfono, aprovechas que pasas por la frutería para comprarla a granel o te das cuenta que tú vas andando más rapido por la calle que los "turroneros" con su trote cochinero. Suprimir las siestas por horas de trabajo, los postres por cafés solos, casi sin azúcar, ir caminando ligero a la universidad mientras cambias el puente a las gafas de natación. Cuesta, y el cuerpo se ha empezado a resentir demasiado pronto. Puede que hoy haya sido como consecuencia de la fatiga a nivel del sistema nervioso central (48 horas tras el Duatlón de Segurilla) o del dormir poco (¿aquel gen encabronao' que me dejó mi madre?). 

Sea como fuere, el caso es que desde las 8.40 que salí de casa esta mañana, éste es el primer lapso prolongado de tiempo en el que simplemente me he relajado. Hoy tampoco pude ir a hacer la compra, menos mal que me salvó la tortilla de la abuela (¡uff!). Y nos hemos plantado en las 21.11 de la noche sin haber hecho más que trabajos, y tareas, y el entreno de natación (casi 5k), y los pedidos de ropa de Inef con Isma. Así que la sesión de carrera se cancela. Por otra parte, la bici sigue sin venir, ya me empieza a entrar el ansia viva, y eso que el próximo "puente" yo no lo tengo (clase lunes y miércoles). Respecto a esto último, un cambio: no será la Orbea Orca Bronze, sino la Silver, y en blanca. Mejor. 

El sábado competí, por no decir que entrené fuerte, en el Duatlón Cross de Segurilla, prueba que ganó Pepe, algo corta en la distancia de carrera a pie ¿15.07 en un 4.5 km? Y que intenté romper con más corazón que piernas después del tute del viernes en la piscina de Quique. En la BTT, aguantar el chaparrón, sé que soy un paquete y no se puede negar, y con el volumen de bici que estoy trabajando más aún. Muy bien Pineño pese a la caída, yo le veía ganando, una lástima. Buen entreno, de cualquier modo. Y el domingo más, con los cuádriceps por la garganta más o menos, jaja, en el Total Training de P. 

Ahora queda seguir luchando día a día, quizás haya encontrado esa pequeña chispa de motivación que me faltaba para echarle huevos a cada día.

PD: Estoy buscando fotos del Du, si alguien tiene que me pase!.