Reflexión Post Copa del Rey

Después de unos 1700km, algo así como 20 horas de furgoneta en 2 días, encerrados con 2, 3 y hasta 4 personas. Uno tiende a hacer balance de lo que hemos ganado o perdido.

Muchos, los más superfluos, medirán el resultado por una posición respecto a los demás. Por suerte, no seré yo uno de ellos.

Otros quizás se dediquen a criticar a sus propios compañeros por no haber ido más deprisa, pero la realidad es que en este tipo de competiciones no cuenta uno, ni dos, sino el cómputo global: el trabajo de todos y cada uno.

Para alguno serán palabras vanas y estúpidas, pero para mí, tiene mucho más valor nuestra vigésima plaza que la primera del Cidade Lugo (por nombrar un equipo). Tenemos que tener en cuenta que nosotros seguimos siendo aficionados, que hacemos esto porque nos gusta. Que muchos entrenan cuando pueden y no cuando quieren. Que algunos no son especialistas de corta. Otros son padres de familia o tienen curro hasta las tantas.

Quizás sea por eso por lo que en vez de criticar a nuestro cuarto hombre, que esta vez fue Samu, lo elogio y me parece tremendo el esfuerzo que hizo. Por mucho que tuviéramos que empujarle o esperarle. Gracias a él puntuamos. Y conseguimos lo que conseguimos. Para bien o para mal.

Puede que suene mediocre para algunos, ya que nuestra aspiración en esta prueba puede llegar a ser hacer un Top 12 o 15 con el paso del tiempo. Pero para mí está completamente justificado y lleno de sentido, si viviéramos como los profesionales, lo seríamos, pero tenemos profesores, cámaras de tv o estudiantes (que es lo más parecido a los pros). Y aunque no lo somos, hemos dado hasta la última gota de sudor, hemos apretado los dientes y hemos sufrido como el mejor, por eso, para mí, seremos, seréis, todos y cada uno, CAMPEONES. El trabajo de Aldana en natación, el sufrimiento de Mula (cuyo estado de forma conoció tiempos mejores), los relevos de Rincón en bici, la agonía de Samu en la carrera a pie, o la mano en la espalda de éste de Andrés. Todo son detalles.

Y las niñas. Primer año que van. Por muy lentas que fueran, acabaron, y teniendo en cuenta que llevaban a una novata como Teresa, que lo dio todo, habría que levantarlas una estatua casi. Y al esfuerzo de Meme en la carrera a pie o el liderazgo de Mika y Patri durante toda la carrera.

Esto va por buen camino. Hay que seguir mejorando, trabajando y no rendirse. Los resultados están viniendo, vendrán, tan solo es cuestión de tiempo.

En cualquier caso.

¡¡¡ENHORABUENA A TOD@S EQUIPO!!!